Ezequiel Villarruel, y su amigo Alan Giménez, decidieron adquirir un auto de carreras y sumarse a la categoría. A continuación, nos cuentan cómo fue la experiencia.
El proyecto surge por la iniciativa de Alan, que vio el auto publicado, rápidamente lo fueron a ver y allí se concretó la operación. La unidad estaba lista para largar, completa. Y con la cercanía a la competencia no hubo mucho tiempo para trabajar sobre el auto, menos para realizar una prueba.
Si se le realizo un service, con cambio de aceite, filtros, se revisó el tema suspensión, modificaron la posición de la butaca y fueron a pista. En las pruebas del viernes, se dedicaron a girar en una Ezequiel, en la otra Alan, para ir conociendo todo.
El domingo en la primera competencia, una falla con la carburación los hizo renegar bastante y sumado a un problema en la presión de aceite, no pudieron concretar ninguna de las carreras. “La idea era poner el auto en pista, tomar la carrera como una prueba, ir puliendo detalles, la realidad es que al motor le falta potencia con respecto al resto. Pero queríamos debutar en la categoría que nos recibió muy bien. Ahora estamos trabajando para mejorar con respeto a la próxima fecha” nos comentaba Ezequiel con respecto a la experiencia ATN.